No me gustan las pantallas touch

Por ejemplo, mi papá le puso un estéreo a su carro que tiene pantalla touch. Acá en el trabajo las impresoras tienen una pantalla touch que, por cierto, muestra las teclas de las letras demasiado pequeñas.

El caso es que yo no tengo nada en contra de la tecnología ni nada por el estilo. Solo es que mis dedos son algo anchos y luego no le atino a lo que quería pucharle, entonces el maldito dispositivo no responde como yo esperaba haciendo cualquier cosa menos lo que yo quería. Cuando quiero subir el volumen de la canción que sale en el estéreo del carro de mi padre, le cambio la ecualización, solo por un milímetro de error. O cuando debo ingresar ni nombre de usuario en las impresoras me salen letras de más.

A lo mejor es que yo soy demasiado menso, pero neta, mis dedos no son delgados y eso no ayuda a usar las pantallas touch.

Ni modo, la tecnología touchscreen y yo no somos compaibles.

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